De niña y ya tenía la inteligencia
tan desarrollada como hoy…
Cosa que ignoraba entonces.
Gloria Fuertes
El 28 de julio marca el centenario de Gloria Fuertes (1917-1998), una figura integral a la niñez de innumerables niños españoles en los años 1970s. Una artista para los niños – una poeta y autora, involucrada en sus programas de televisión – ella está conectada al postismo, un movimiento literario que surgió en Madrid entre 1945-50 que enfatiza la imaginación, el humor, y la falta de prejuicios.
En 1961 obtuvo una beca Fulbright y enseñó clases de literatura española en la Universidad de Bucknell, PA, donde por dos años sus alumnos la nombraron “Profesora Más Popular del Año”. Por su literatura infantil, como Cangura para todos, ganó premios importantes como el Diploma de Honor del Premio Internacional de Literatura Infantil Hans Christian Andersen y la Fundación March para Literatura Infantil. Escribió guiones para los programas infantiles de televisión, como Un globo, dos globos, tres globos. Les dio consejos a lectores a través de las revistas famosas como Discóbolo.
Detrás de sus logros era su actitud: “El humor es lo más importante…Si la literatura está en decadencia es porque los escritores están demasiado tristes…Siempre es mejor reírse de todo.”
Pero en su literatura y su vida, con la felicidad y positivismo existe la tragedia. En 1934, debido a la muerte de su madre, dejó la escuela para trabajar en una fábrica. El mismo año, terminó pero no publicó Isla ignorada, su primer poemario. La Guerra Civil (1936-1939), en que perdió dos novios, y más tarde las bombas atómicas le presentaron la tragedia de la guerra y contribuyeron a su pacifismo.
La personalidad de Gloria Fuertes se destacó por su individualidad. En su niñez pasó los días explorando su barrio y jugando en partidos de fútbol en que ella era la única chica. Durante la guerra, además de leer y beber vino en la taberna, ella andaba en bici por la ciudad con pantalones y corbata, y jugaba a muchos deportes como hockey y fútbol. El movimiento hippie que ella encontró en Pennsylvania coincidió perfectamente con ella. “La gente no cala en su sentido de rebeldía.”
También era lesbiana. Conoció a Phyllis Turnbull, una profesora de la Universidad de Bryn Mawr y la tutora de inglés de Gloria. Con Phyllis construyó una biblioteca cerca de Madrid, en que Gloria hizo los libros y las actuaciones para los analfabetos. Pero en 1971, Phyllis inesperadamente murió. Gloria se puso muy deprimida. Para superar su depresión, fumó, bebió, y presentó su poesía y escuchó la poesía a través del radio mucho. En 1973, publicó trabajos como Sola en la sala, un poemario sobre la muerte de Phyllis y sus actitudes hacia el amor.
Francisco Nieva, dramaturgo y amigo de Gloria Fuertes, conectó esta personalidad a su trabajo: “…desde su feminismo quiso cambiar el mundo empezando por los niños…con un discurso siempre sencillo y siempre profundo.”
Una cita que recalca La Fundación Gloria Fuertes es del prólogo de su primer poemario, Isla ignorada. Es sobre su trabajo, pero también extiende a su vida entera: “Mi poesía está aquí, como nació –sin ningún ropaje de retórica–, descalza, desnuda, rebelde, sin disfraz. Mi poesía recuerda y se parece a mí.”
Fuentes:
Fuertes, Gloria. El Libro De Gloria Fuertes: AntologiÌa De Poemas y Vida. Edited by Jorge De Cascante, 3rd ed., Blackie Books, 2017.
“Biografía” [“Biography”]. Fundación Gloria Fuertes, edited by Luzmaría Jiménez Faro, 2014, www.gloriafuertes.org/index.php/biografia. Accessed 17 Feb. 2018.
La poetisa Gloria Fuertes en una imagen de archivo. El Español, www.elespanol.com/blog_del_suscriptor/opinion/20170627/227047295_7.html. Accessed 16 Feb. 2018.